Y te quiero aquí a mi lado.
Estamos dando pasos como niños,
de a poco... parándonos, caminando con tambaleos
aprendiendo a estabilizarnos en este caos de vida,
pronunciando suavemente cada palabra que nos envuelve de amor
y nos hace temporalmente felices, aun como niños.
Aquí nos encontramos, en un vaivén de sentimientos,
una revolución de emociones e iniciándonos en nuevas cosas,
como los adolescentes que se fugaron velozmente de nuestros cuerpos,
dejándonos con tantas dudas en esta vida,
sin siquiera conocernos por completo a nosotros mismos.
Y tu con tus oscuros ojos pequeños mirándome de reojo,
tu soplido que alivia mis dolores, tu constante positivismo
que a veces parece tan fácil de llevar día a día,
tu sincera risa que es tan simpática
y tu extraña forma de querer arreglarlo todo,
hacen que mi vida no solo sea mía
si no que también tuya.
Estamos esperando, algún soplido que nos refresque
y alivie este camino que recorremos de repente de la mano
y otras veces abrazados o sin mirarnos;
dando pisadas más fuertes que dejan nuestras huellas en la etapa de la madurez,
de las decisiones... de la libertad;
esperando simplemente ser felices,
así como somos...
solo nosotros, pero llenos de amor y de vida.
0 comentarios:
Publicar un comentario